Faq’s (preguntas frecuentes)
En esta sección pueden encontrar algunas de las preguntas más frecuentes que nos realizan los clientes junto con nuestras respuestas. Haga clic en cualquiera de las preguntas para mostrar la respuesta completa.
¿Por qué aconsejamos anestesiar o calmar a los animales para ciertos procedimientos?
Es frecuente que aconsejemos a los propietarios que acuden a nuestro centro la realización de determinados procedimientos médicos bajo sedación o anestesia.
Las razones por las cuales podemos aconsejar la sedación o anestesia son varias, pero siempre persiguen aumentar la seguridad para el animal y la eficacia del procedimiento realizado, en ningún caso nuestra comodidad.
Si bien muchas formas de anestesia o sedación pueden implicar potencialmente un cierto riesgo para el paciente, este riesgo en realidad es menor que el derivado de la manipulación de los animales sin sedación. Las razones para la sedación/anestesia son varias:
En primer lugar por cuidadosa que sea la manipulación del animal, ésta puede provocar estrés (por miedo o por procedimientos molestos y dolorosos), que supone un riesgo más grave de lo que parece a simple vista. El estrés intenso podría llegar a provocar muerte súbita en casos extremos, así como complicaciones posteriores como bajadas de defensas y anorexia, que aún siendo menos drásticas pueden empeorar el curso de una enfermedad y retrasar la recuperación.
En segundo lugar, la sedación permite mejorar la eficacia de la exploración, permitiendo examinar al animal de forma mucho más exhaustiva de lo que sería posible con el animal consciente, obteniendo así más información en menos tiempo. Muchas pruebas y analíticas requieren que el animal permanezca inmóvil, de modo que la anestesia permite tomar muestras suficientes para análisis en un tiempo mínimo y obtener resultados óptimos de las pruebas realizadas (ecografías, radiografías, etc.). No hay nada más frustrante y peor para los intereses del paciente que estresarlo para la realización de una prueba y acabar con una muestra insuficiente, deteriorada o con un resultado no válido.
En tercer lugar consideramos que reducir el miedo y la ansiedad naturales en nuestras mascotas al ser manipuladas por desconocidos en un ambiente extraño, también es una forma de cuidar su bienestar.
Por último, el grado de sedación y anestesia que perseguimos es siempre el mínimo necesario para realizar el procedimiento, tanto por su duración como su profundidad. Además el uso de anestesia inhalatoria (la misma que en personas) incrementa muchísimo la seguridad de estos procedimientos. Durante el procedimiento se monitorizan las constantes vitales de forma exhaustiva, que permite un control de los riesgos incluso mejor que cuando son derivados del estrés.
En estos animales en los que sea posible se ofrece a los propietarios realizar un analítica pre-anestésica para detectar patologías que podrían complicar el procedimiento de sedación/anestesia. Antes de la anestesia, se pide al propietario rellenar y firmar un documento de consentimiento informado, donde consta que se le han explicado los beneficios y posibles riesgos que se derivan de la anestesia que se la va a practicar a su mascota.
Me he encontrado un pájaro (u otro animal salvaje) herido: ¿qué puedo hacer?
En general nuestro objetivo en estos casos sería devolver al animal a la naturaleza siempre que sea posible.
Muchas de las aves que las personas recogen con intención de ayudarlas pertenecen a especies protegidas (vencejos, rapaces, etc.), que no pueden ni deben mantenerse como mascotas por diferentes razones: no es legal, ni ético, ni fácil en absoluto, ya que con frecuencia es muy complejo proporcionarles los cuidados necesarios.
Cuando se trata de especies protegidas, en el ámbito de Cataluña podemos contactar con el Servicio de Guardas Forestales (93 574 00 36) para que vengan a recogerlos y los lleven a un centro especializado donde los tratarán adecuadamente, con la intención de devolverlos a la naturaleza. Si se trata de una especie no protegida (gorriones, palomas, cotorras, etc.) será necesario encontrar a alguien que se haga responsable del esfuerzo necesario para atenderlos. En nuestro centro intentaremos colaborar en todo lo posible.
¿Cómo debo transportar a mi mascota a la clínica? ¿Qué precauciones debo tomar para hacer la visita más efectiva?
Conejos, hurones y roedores: Se pueden llevar en su jaula habitual si el tamaño de la misma lo permite, o bien en un transportín adecuado.
Los bebederos suelen gotear agua con los vaivenes del transporte, de modo que es preferible retirarlos durante el mismo.
A no ser que estén muy acostumbrados, no es conveniente traerlos en brazos, pues aunque no lo manifiesten probablemente se estresan bastante. El animal debe viajar en un lugar freso y bien ventilado, especialmente en verano, ya que son propensos a los golpes de calor (sobretodo conejos y chinchillas).
Aves (loros, periquitos, inseparables, ninfas, canarios, jilgueros, diamantes, gallinas, faisanes, pavos, patos, gansos…): Se pueden llevar en su jaula habitual si su tamaño lo permite, o bien en un transportín adecuado. Si se traen en la jaula, mejor cubrirla con una sábana o un trapo grande para que no se estresen con el viaje.
Es preferible no limpiar el suelo de la jaula el día de la visita, pues los excrementos y los restos de comida nos pueden proporcionar información muy importante.
En el caso loros que no sean dóciles, si se traen en una jaula, es conveniente que esta disponga de una puerta grande o un suelo extraíble para poder sacarlos sin dificultad. Para capturar en casa un loro arisco, se pueden apagar las luces y cogerlo echándole una toalla encima.
Los bebederos suelen gotear agua con los vaivenes del transporte, de modo que puede ser preferible retirarlo, i poner un trozo de fruta que proporcionará agua y alimento al mismo tiempo.
Reptiles: En general pueden viajar en una caja a prueba de fugas con ventilación. Durante las épocas de frío es conveniente poner alguna fuente de calor (botella o bolsa de agua caliente) dentro de la caja para que mantenga la temperatura adecuada para el animal durante el transporte.
A causa de la alta frecuencia de problemas parasitarios en reptiles, es conveniente traer siempre una muestra de excrementos (lo más recientes posible, pero también nos sirven aunque sean de varios días atrás), para su análisis microscópico.
Las serpientes son muy hábiles escapándose por pequeños agujeros, y por eso es importante que la caja de transporte sea a prueba de fugas. Opcionalmente se pueden traer también dentro de un saco de tela o una funda de almohada bien anudada. Para las tortugas de agua no es necesario que la caja vaya llena de agua, y pueden aguantar bien trayectos de 2-3 horas sin agua o con solo una pequeña cantidad para mantener la humedad. Traerlas con mucha agua puede representar un gran esfuerzo para el anima, que tiene que nadar en el agua agitada durante el transporte. Para los camaleones es importante que dispongan de una pequeña rama o palo dónde puedan cogerse, o simplemente un trozo de papel de periódico arrugado. No se recomienda llevarlos en las manos o encima nuestro, porque aunque no lo manifiesten probablemente se estresan bastante.
Si se prevé la posibilidad de tener que realizar alguna analítica o anestesia, puede ser conveniente retirar el alimento a las aves y los hurones dos o tres horas antes de la visita.
¿Cómo puedo saber si mi loro es macho o hembra?
La mayoría de especies de loros no tienen dimorfismo sexual, y eso significa que no se puede ver externamente si son machos o hembras. Nuestros veterinarios especialistas les pueden informar si la especie de loro que ustedes poseen, tiene alguna característica externa que diferencie un sexo del otro, y si no es así les podrán informar de cual es la mejor prueba para saberlo.
Existen dos opciones para saber cual es el sexo de su pájaro, sexaje laboratorial (con sangre o plumas), o mediante endoscopia. Para el sexaje con sangre o plumas es necesario que el veterinario realice la toma de muestras en la consulta, porque aunque es un procedimiento sencillo es importante saber como tomar las muestras sin que suponga un riesgo para el animal, en qué recogerlas y como mandarlas al laboratorio sin que se estropeen durante el proceso. No todos los laboratorios realizan estas analíticas y son necesarios laboratorios especializados y cualificados dónde se analice el ADN de las muestras. El otro método de sexaje es la endoscopia, que consiste en una pequeña intervención en la cual se miran los órganos sexuales del ave mediante una pequeña cámara especial. Esta prueba se realiza bajo anestesia, y además de informarnos del sexo del ave nos aporta información sobre su estado de salud, y en que fase reproductiva se encuentra.